A Mariña, Galicia de corazón’, es la nueva marca turística mariñana y toda una declaración de intenciones que resume lo que vivieron el selecto grupo de suscriptores que asistieron al último viaje organizado por el Club. Una vivencia de cuatro días y tres noches en el que pudieron descubrir el norte de Galicia, en un inolvidable y sorprendente recorrido por ‘A Mariña Lucense’, al norte de la provincia de Lugo y a orillas del imponente Mar Cantábrico.
La experiencia por este apasionante destino, se inició con la llegada a Santiago de Compostela en compañía de Mamen Oliver del Club del Suscriptor. En la capital autonómica de Galicia, fueron recibidos por Begoña Suárez; la simpática guía que les acompañó durante el viaje. En Santiago, contaron con tiempo libre para disfrutar de su ambiente y recorrer el barrio antiguo, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. Bajo un tiempo ideal, tremendamente soleado, pudieron conocer la plaza del Obradoiro y admirar los edificios que la rodean. Antes del almuerzo, llegaron a la joya de la corona: la Catedral de Santiago de Compostela. En su interior, se deleitaron con el Pórtico de la Gloria, la entrada occidental de la catedral románica, obra del Maestro Mateo, y algunos de los presentes le dieron el tradicional abrazo al Santo, práctica recientemente recuperada.
La visita a Santiago de Compostela se completó con un merecido almuerzo en el Hotel Castro, donde disfrutaron de un tradicional caldo gallego y una exquisita merluza en salsa gallega. Al finalizar la comida, tomaron rumbo al hotel Thalasso Cantábrico situado en la ría de Viveiro, en Lugo.
A la mañana siguiente, se dirigieron a Os Teixois, un singular conjunto en la parte occidental de Asturias, donde visitaron la villa de Taramundi. Un gran parque temático al aire libre y uno de los lugares más famosos del mundo en el arte de la cuchillería. En Taramundi, además de revivir la vida rural de antaño durante una interesante demostración, algunos de los suscriptores compraron cuchillos y navajas de recuerdo. Luego del almuerzo, preparado por el restaurante del hotel Chiquín, con la fabada asturiana y la ternera asada como protagonistas, continuaron su recorrido hacia Tapia de Pasariego y su encantador puerto pesquero. Además, durante la visita se toparon con una piscina natural de agua salada que causó furor entre los suscriptores y en donde uno de ellos, entre risas y vítores, se lanzó sin pensarlo dos veces.
En Taramundi, pudieron revivir la vida rural de antaño durante una interesante demostración
En el tercer día, Galicia les siguió sorprendiendo con las impresionantes estructuras rocosas de la Playa de las Catedrales, en la provincia de Lugo, entre Foz y Ribadeo. Prosiguieron con la visita a Ribadeo, ubicada en la orilla oriental del río Eo, seguida de un copioso almuerzo en el restaurante La Yenca, con espectaculares vistas al mar. El paseo continuó en el puerto pesquero de Foz, uno de los enclaves más bellos de la costa lucense. Como colofón, de regreso al hotel y antes de volver a Mallorca a primera hora de la mañana, visitaron el pueblo de Viveiro (Lugo) por recomendación de la guía del viaje.
Sin duda, fue un viaje inolvidable, que contó con un grupo fantástico en el que nacieron nuevas amistades. En palabras de Mamen del Club, «hubo excelente ambiente, muchas risas y ganas de pasarlo muy bien».